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En la hora del vermú, a eso de la una pasadas, en los jardines de Maneras de Vivir actuaban los cántabros Duro, con patatas y costillas que no llegamos a catar pues nos retiramos algo antes de que acabaran. Ya a la tarde, tras haber echado siesta y esta vez dentro de la sala (La Pista), a eso de las 7 iba a ser el turno de Los Sex y las víctimas del sueño americano (es decir, los Desvariados).

Los Sex presentaron un espectáculo arrasador, entrando a matar desde el principio con temas pegadizos repletos de coros y punteos, con una presencia en escena apabullante. Su vocalista Daniel Agudo y su guitarrista Daniel Bautista parecía que llevaban las riendas, aunque la sección rítmica (a cargo de Pedro Fuentes a los timbales y Sergi Ventura al bajo) tampoco se quedaba atrás. Precisamente, era por culpa del bajista que cada pocos segundos se nos partiera el cuello para desatender el ajetreo del tablao y redirigir nuestra mirada hacia él por un nuevo punteo, arreglo o detalle de sus cuatro cuerdas. Impresionante, y nuestro aplauso desde aquí (aunque ya se lo dijéramos al acabar) por ser de lo mejor de la noche.

Tras el show de los teloneros y el inicio de Desvariados, de las primeras palabras de Adri (cantante, guitarrista y único miembro original de la banda) hacia los allí presentes fue para mencionar la gran actuación de Los Sex, diciendo que (y cito literalmente) «os han follado la boca y no os habéis enterado».

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Antes que todo esto, había salido solo con su guitarra a interpretar una difícil Todavía, por lo sentida y personal que parece («fue de esas que escribes rápido, que sale sola y dices ufff he soltado todo»¹). Y algo antes, (antes incluso de que Adri subiese a la barra del bar o de que le pasearan a hombros por el garito ) habían interpretado Muévete en la oscuridad, esa pedazo de canción del nuevo disco que me ha vuelto loco desde la primera vez, con una música entre alguna de Status Quo y el Breakthrough de Queen y una letra que me transmite tan buen rollo que la pediría para que sonara en mi funeral… (y abro paréntesis para añadir que acabo de enterarme de que se trata de una versión-tributo a Burning).

Y así de bien nos quedamos, aún con toda la noche por delante y un estupendo sabor de boca (por el rock digo, no por aquello que Los Sex habían hecho con nosotros…). Tres grandes bandas (no nos olvidamos de Duro, aunque apenas habláramos de ellos) para arrancar el Almazán Suena. Por cierto, el resto de grupos que actuarán hasta octubre se pueden ver en las redes del bar. Dejo a continuación el resto de fotos de Los Sex y Desvariados, antes de despedirnos del Maneras de Vivir, de las calles de Almazán y de sus maravillosos torreznos. Volveremos, seguro. Sea jueves santo o no. ¡Mambo!